El arte chino del feng shui surge de la idea de que tu espacio vital refleja y afecta tu vida. Con la energía, o chi, como fuerza guía. El objetivo del buen feng shui es armonizar nuestro entorno con nuestro yo interior. Con 3000 años de antigüedad, el feng shui es una práctica compleja, y crear un espacio perfectamente “equilibrado” sin duda requerirá la guía de un maestro del feng shui. Dicho esto, un poco de conocimiento básico y algunos consejos prácticos pueden encaminarlo hacia la creación de un hogar más armonioso (especialmente si está buscando que este año sea un poco menos estresante que el anterior). Sigue leyendo para conocer nuestro desglose a continuación.
Los cinco elementos
En el feng shui, cada uno de los cinco elementos corresponde a un color y una dirección. Para promover el flujo de chi positivo, es importante tener esto en cuenta. Ya que la dirección que mire tu hogar determinará los mejores materiales y colores para cada área. Por ejemplo, si una esquina de tu sala de estar apunta hacia el este, que está atada a madera y el color verde. Podrías agregar una mesa auxiliar de caoba o una silla decorativa vestida con terciopelo esmeralda.
- Elemento: Agua
- Colores: Negro y azul
- Dirección: Norte
- Elemento: Fuego
- Color: Rojo
- Dirección: Sur
- Elemento: Tierra
- Color: Amarillo
- Direcciones: noreste y suroeste
- Elemento: Metal
- Color: Blanco
- Direcciones: Sur y suroeste
- Elemento: Madera
- Color: Verde
- Direcciones: Este y sureste
Hacer una entrada
A veces llamada “la boca del hogar” con respecto al chi, la puerta de entrada es donde la energía entra y comienza su viaje a través de una casa. Con eso en mente, una puerta que se abre hacia adentro es preferible a una que se abre hacia afuera. Ya que invita al chi adentro en lugar de empujarlo. Si bien cambiar las bisagras de tu puerta puede no ser práctico, aún puedes considerar los cinco elementos al decorar tu entrada como un camino hacia un hogar más nutrido. Una puerta orientada al norte se beneficiaría de un par de maceteros negros llenos de hortensias blancas o una fuente de agua de piedra salpicada de flores de loto.
Conserva lo que amas, limpia el resto
En el feng shui, cada objeto de tu hogar es como un recipiente de energía tanto buena como mala. Aunque esto puede parecer abrumador. En realidad es uno de los principios más fáciles de seguir cuando se trata de crear un hogar lleno de chi positivo. Simplemente purga todas las cosas en tu domicilio que ya no te sirven o no te hacen feliz. Ten en cuenta que se trata de algo más que una apariencia bien decorada. Esos candelabros de plata antiguos de tu ex suegra que nunca tuviste una palabra agradable que decir sobre nadie pueden verse fabulosos en tu repisa de la chimenea orientada al sur.
Agrega piezas cuidadas y mucha luz
El aire y (mucha) luz son cruciales para un hogar con buen flujo. En el feng shui, las esquinas oscuras y las piezas sucias son tan beneficiosas para una casa como las bolsas para los ojos. Empieza por respirar profundamente y mirar bien a tu alrededor. ¿Sigue allí esa silla hecha jirones que has querido reemplazar o reparar? ¿Se podría iluminar tu sala de estar con algunas velas o una nueva lámpara colgante ? Los pequeños retoques de decoración hechos en interés del chi pueden ser tan buenos para ti como tu nueva rutina de yoga matutina.
Limpia tu aire
El aire que respiras también puede influir en el chi de tu hogar. Por supuesto, existen los efectos negativos provocados por los contaminantes de la pintura, las alfombras y los productos de limpieza. Pero incluso el aire que está simplemente viciado puede ser perjudicial para el flujo de energía. Abre tus ventanas con tanta frecuencia como puedas. Incluso en los meses más fríos, para que tus habitaciones respiren, e invierte en algunas plantas de interior para que actúen como purificadores de aire naturales. La dosis de frescor seguramente te hará sentir bien.
Los espejos importan
Los espejos pueden hacer maravillas cuando se trata de feng shui. Colgar uno para reflejar la vista de tu jardín traerá la belleza del aire libre y toda la energía positiva que conlleva. Intenta agregar una versión de gran tamaño detrás de una lámpara de pie para expandir visualmente una habitación y duplicar los efectos de una sola bombilla. Mientras tanto, un espejo redondo enmarcado en oro habla de las energías vinculadas a la riqueza y la abundancia. Lo que lo convierte en una valiosa adición a cualquier oficina en casa.
